viernes, 29 de mayo de 2009

{Mario Benedetti}


Metro los héroes, a las 10:48hrs entramos al sauna-vagón. Todos y cada uno de los allí presentes usaba audífonos, salvo nosotros, era la oportunidad perfecta y aproveché para sorprenderte. Recitar a viva voz ese poema que tanto te gusta. Tu rostro enrojecido se fue abriendo en la medida que ninguno de los cercanos parecía inmutarse, recitábamos emocionados al unísono, cuando entonces al final del poema, justo en la última palabra, todos en ese vagón se libraron de sus audífonos y de su mirada inerte para gritar con nosotros “¡Viceversa!”

2 comentarios:

María Constanza dijo...

o sea
resumiendo
estoy jodido
y radiante
quizá más lo primero
que lo segundo.
Un saludo =)

Anónimo dijo...

Era especial, lo que nació, lo que creamos... era especial.
No importan las manchas que ambos tiramos, había algo que nos amarraba o nos amarra.

Cuando te miro a tu beso alocado, dejo pasar todo lo respirado!!

Unabrazo del de nosotros,
un aventura como aquellas!

M.