domingo, 31 de enero de 2010

{Ventanas abiertas}

Esa tarde unida con olores al tiempo
Esa tierra amarrada al atardecer bajo el horizonte
Esas nubes reflejadas en los ojos del llanterío
En los ataúdes que vuelan bajo tierra
Se desarman los sueños

En esas noches internas tan fatigadas
¿Por cuanto tiempo más continuaremos perdiendo fuerzas?
En dos días me visto de ruedas y me uniré
Al perfume de las montañas
Y al abrazo de los pétalos
Que explotan de vez en cuando
Sobre los inmigrantes y los barrios
Sobre mis dedos y esos campos llanos

Desaparecemos escondidos en una costa
Sobre el mar flotando algunos pueblos ahogandose
Que no saben morir y resisten
Nacieron para nadar contra la corriente.

No hay comentarios: